¿Qué es la meniscectomía y cuál es su tratamiento mediante la fisioterapia?

¿Qué es la meniscectomía y cuál es su tratamiento mediante la fisioterapia?

¿Qué es la meniscectomía y cuál es su tratamiento mediante la fisioterapia?

En el fútbol, las lesiones de meniscos son habituales. Cuando estas lesiones requieran la intervención quirúrgica comúnmente se opta por conservar la mayor parte del menisco posible, para evitar una artrosis futura, por lo tanto, la meniscectomía parcial es uno de las intervenciones más exitosas para el tratamiento y la curación de las lesiones meniscales.

A lo largo de este artículo hablaremos acerca de esta intervención quirúrgica y su proceso de rehabilitación y fisioterapia correspondiente.

¿Qué son los meniscos?

En la rodilla los meniscos compensan la no concordancia de la superficie articulares que se encuentra conformadas por el fémur y la tibia, estos son fibrocartílagos semilunares que aumentan la superficie de contacto entre ambas superficies articulares.

Los meniscos forman un papel importante en la congruencia articular aunado a esto también contribuyen a la absorción de impactos en la transmisión de fuerzas entre el fémur y la tibia, y a la estabilidad de la rodilla.

¿Qué son las lesiones meniscales?

Las lesiones meniscales son todas aquellas alteraciones que afectan de alguna manera u otra el fibrocartílago semilunar que se encuentra entre el fémur y la tibia.

Las lesiones en los meniscos al igual que otras lesiones de rodillas son muy habituales en el fútbol, siendo un 17% del total de las lesiones según diferentes estudios epidemiológicos.

Las lesiones o roturas meniscales pueden producirse sin contacto, algunos estudios han demostrado que en jugadores profesionales un 2-3% del total de las lesiones que ocurren durante la temporada completa son de este tipo, la lesión de meniscos es tres veces menos habitual que la del ligamento lateral interno de la rodilla.

Las roturas del menisco interno suelen ser más frecuentes que las de menisco externo en deportistas y un mayor porcentaje de las lesiones en menisco externo están asociados al ligamento cruzado anterior.

meniscectomia

¿Cuál es el mecanismo de lesión?

En flexión, la rodilla es mucho más vulnerable a sufrir lesiones ligamentosas y meniscales, y en extensión es más vulnerable a las fracturas articulares y a las roturas de ligamento.

El giro con el pie apoyo, los aterrizajes con la rodilla extendida y las frenadas bruscas con una sola pierna pueden ser los principales movimientos que producen esta clase de lesiones.

Las lesiones del menisco aparecen como resultado de la acción del peso corporal que se combina con movimientos incorrectos forzado o excesivos, tanto en los movimientos de flexión - rotación como en la extensión - rotación. Aunado a ello, la mayoría de los desgarros meniscales especialmente del menisco externo están asociados a lesiones ligamento cruzado anterior.

Las lesiones que se dan en el menisco externo son más graves que en el menisco interno, debido a que el primero tiene mayor importancia en relación con la articulación de rodilla, no obstante, algunos estudios han demostrado que las roturas aisladas del único externo son las que mejores resultados obtienen.

Las lesiones en los meniscos aumentan el riesgo de inestabilidad en el futuro y de desgaste y desgarros con el paso del tiempo.

¿Cuál es el tratamiento para una lesión meniscal?

El tratamiento se elegirá según el tipo y la localización de lesión, se podrá optar entre intervención quirúrgica, reparación artroscópica o meniscectomía parcial o total, sin embargo, también es posible seleccionar un tratamiento conservador que incluye protocolos de fisioterapia y ejercicios físicos controlados, una vez que se haya superado la inflamación y el dolor inicial.

La meniscectomía está dentro de los tratamientos quirúrgicos más usados.

La meniscectomía está dentro de los tratamientos quirúrgicos más usados debido a que conduce a una recuperación mucho más rápida contribuyendo entonces a la pronta reintegración del deportista en sus actividades…

¿Qué es la meniscectomía parcial?

La meniscectomía se trata de la extracción a través de una cirugía de la totalidad o de una parte del menisco debido a una rotura del mismo.

A pesar de la naturaleza mínimamente invasiva que posee esta intervención los pacientes experimentan dolor e inflamación que conduce a una pérdida del rango de movimiento, función alterada y disminución de la fuerza del músculo cuádriceps.

La propiocepción juega un papel importante en la protección de la rodilla y sobre todo en movimientos extremos, en el menisco se identifican tres tipos de mecano receptores presentes en los cuernos anteriores y posteriores:

  • Las terminaciones de Ruffini.
  • Los órganos tendinosos de Golgi.
  • Los corpúsculos de Pacini.

Cuando se realiza una menisectomía parcial, puede haber una alteración en la propiocepción de la rodilla debido a la pérdida de mecanorreceptores y por lo tanto va a requerir una recuperación tanto de la mecánica como de la funcionalidad.

Los principales objetivos en fisioterapia tras la meniscectomía es la disminución del dolor y la inflamación que están asociados a la cirugía, mantener el rango de movilidad y el acondicionamiento general, así como restaurar la función muscular y optimizar la coordinación neuromuscular de la extremidad inferior.

Tras esta intervención es necesario movilizar la articulación de la rodilla lo antes posible para así evitar la atrofia muscular y estimular el drenaje linfático. Estos movimientos, que no deben poseer cargas, favorecerá el mantenimiento de la lubricación fisiológica.

¿Cuál es el tratamiento posterior a una menisectomía?

Una intervención temprana e intensa es vital para conseguir un resultado funcional exitoso tras una meniscectomía parcial. En la rehabilitación de esta lesión como en otras lesiones deportivas, la rehabilitación funcional debe comenzar en fases iniciales del proceso.

En relación con la recuperación de la fuerza del cuádriceps, el cual es el músculo que resulta más afectado, se requiere aproximadamente entre 4 a 6 semanas para volver a conseguir los valores de fuerza preoperatorios y unas 4 semanas aproximadamente para los isquiotibiales.

Fases de rehabilitación

La rehabilitación se desarrollará en dos enfoques importantes: la readaptación general y la readaptación específica.

Readaptación general.

Fase inmovilización: luego de la intervención quirúrgica se suele tener una estancia hospitalaria no superior a las 24 horas, posterior a esto se debe realizar una inmovilización relativa, la cual se prolonga hasta las 7 a 8 días cuando el futbolista de forma progresiva pueda realizar la carga completa. Para que el individuo pueda permitirse esta carga completa debe cumplir con los siguientes requisitos:

  • Que no exista inflamación.
  • La amplitud de movimiento debe abarcar desde los 5° hasta 110°.
  • Que el individuo sea capaz de realizar movimientos progresivos contra una resistencia de 10 kg sin que exista dolor localizado en la zona donde se realizó la reparación.

El principal objetivo de esta fase es respetar y permitir los procesos de reparación tisular, por lo tanto, se va a trabajar de forma específica para disminuir el edema y reducir el dolor, además de recuperar la movilidad articular y mantener el tono muscular, específicamente el músculo cuádriceps.

Es importante en esta etapa prescribir ejercicios para la musculatura no involucrada con la finalidad de mantener un buen estado físico y un tono muscular adecuado de esta manera se mantiene niveles altos de autoconfianza y de motivación para el lesionado.

Se realizarán ejercicios de propiocepción, que iniciarán en descarga para progresar a la carga parcial y total a través de ejercicios en apoyo bipolar sobre una superficie estable para luego pasar a ejercicios sobre apoyo monopodal, de igual forma se evitarán movimientos de rotación.

Readaptación específica

El objetivo principal de este proceso será alcanzar el alta deportiva que capacite al individuo a volver a entrenar en las mismas condiciones que se encontraba antes de la intervención, esto gracias a trabajos de readaptación de las habilidades básicas que afectan a la zona lesionada como correr, saltar, cambiar de dirección, entre otros, y de entrenamientos de los elementos técnicos propios de la disciplina deportiva, es decir, los gestos deportivos.

Se dividirá en cuatro fases:

  • Fase de aproximación: en esta fase se trabajarán ejercicios de fuerza concéntricos-excéntricos controlados, reeducación de los desplazamientos básicos, es decir, laterales, adelante y atrás, mediante circuitos y ejercicios de propiocepción con cargas totales en superficies inestables progresando de bipolar a monopodal.

En relación a las áreas no lesionadas se debe mantener la capacidad cardiorrespiratoria mediante el uso de la elíptica y circuitos de reeducación de desplazamiento, se fortalecerá el tren superior y se aplicarán ejercicios concéntricos e isométricos en un plano estable con la finalidad de mantener una estabilidad central.

  • En la fase de orientación: se realizarán trabajos en gimnasio con estiramientos activos y extensión activa, fuerzas explosivas, ejercicios de propiocepción y estabilidad central a través de ejercicios con control dinámico. En relación al trabajo en campo se aplicarán ejercicios de resistencia, circuito reeducativo con desplazamientos y giros en pivotes.
  • En la fase de pre optimización: Se realizarán trabajos en el gimnasio con estiramientos activos y en tensión activa, entrenamiento de la potencia en cadena cinética cerrada, fuerza y propiocepción. En relación con el trabajo en campo se introducirá de manera progresiva el método de contrastes, facilitando la combinación de ejercicios explosivos con elementos técnicos propios del deporte, circuitos físicos activos y reeducación de habilidades avanzadas con balón.
  • Fase de optimización: se realizarán calentamientos previos a la sesión grupal con la finalidad de prevenir lesiones y se realizarán ejercicios de control dinámico incidiendo rotación del tronco a velocidades altas y con respecto al trabajo en campo se realizarán circuitos físicos técnicos que requieran de la manifestación reactiva de la fuerza reentrenamiento.

La fisioterapia en el ambiente deportivo desempeña un papel importante para la rehabilitación de los deportistas, lo que contribuye a una recuperación rápida que permite al individuo volver de manera satisfactoria a sus actividades cotidianas.