Esguince de tobillo y su tratamiento mediante el protocolo MEAT

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Esguince de tobillo y su tratamiento mediante el protocolo MEAT

Esguince de tobillo y su tratamiento mediante el protocolo MEAT

Es de saber que en cuanto a lesiones se trata, el esguince de tobillo es una de las más comunes a nivel mundial, afectando a todas las edades principalmente a deportistas y mujeres embarazadas, incidiendo sobre su salud y bienestar físico, para ello ha surgido un protocolo de tratamiento denominado MEAT del cual hablaremos en el siguiente articulo desarrollando una herramienta novedosa e interesante

Cabe destacar que para el abordaje del esguince de tobillo se han desarrollado múltiples técnicas que son de mucha ayuda como puede ser el masaje transverso profundo, el cual te enseñamos en nuestro curso a través de Fisiocampus.

Por su parte, antes de entrar en un análisis completo sobre el esguince de tobillo, es esencial el conocimiento de las bases anatómicas que conforman el complejo articular del tobillo donde podemos encontrar los siguientes:

Articulaciones del complejo articular del tobillo

Compuesto principalmente por tres (3) articulaciones propiamente ubicadas en dicha región las cuales se mencionan a continuación:

  • Articulación tibioperonea distal: Se denomina como una articulación plana que realiza deslizamientos de manera ascendente, descendente, anterior y posterior siendo dependiente del movimiento ocurrido en las articulaciones inferiores, sus carillas articulares forman los llamados maléolos interno y externo compuestos por el tercio distal de la tibia y peroné respectivamente

  • Articulación talar o tibioperonea - astragalina: Se trata de una articulación sinovial móvil catalogada de tipo ginglimo, bisagra o troclear, es capaz de realizar movimientos de flexo-extensión a través del eje transversal y plano sagital sus carillas articulares superiores forman la conocida mortaja tibioperonea la cual tiene una forma cóncava siendo articulada con la tróclea del astrágalo respectivamente

  • Subtalar o subastragalina: Denominada según los anatomistas como una articulación de tipo trocoide o pivote la misma realiza giros sobre su propio eje a través del plano transversal y eje longitudinal

Todas éstas articulaciones trabajan en conjunto para dar movilidad al pie durante el proceso de la marcha y bipedestación, así mismo, existen distintos estabilizadores pasivos que evitan estados de luxación u otro tipo de daño intraarticular, dentro de ellos se pueden encontrar:

Ligamento colateral externo o lateral

Dividido en tres (3) fascículos los cuales son los siguientes:

  • Ligamento peroneo astragalino anterior: Originado a nivel de la cara anterior del maléolo externo discurriendo en sentido anterolateral para llegar a la cara anteroexterna del hueso astrágalo, el mismo tiende a ser el más lesionado a nivel de los esguinces de tobillo teniendo una forma cuadrilátera, aplanada y delgada.

  • Ligamento peroneo - calcáneo: Intermedio entre los distintos fascículos, se dirige de manera vertical y oblicua desde el maléolo externo hasta el hueso calcáneo.

  • Ligamento peroneo astragalino posterior: Siendo el más resistente y menos lesivo de todos se origina a nivel de la cara posterior del maléolo externo para insertarse en la cara posterior del hueso astrágalo

Ligamento colateral interno o medial

También conocido como deltoideo, está conformado por dos (2) capas las cuales son las siguientes:

  • Superficial: Originada a nivel del borde inferior del maléolo interno para discurrir en sentido posterior hacia el astrágalo y calcáneo, anterior para terminar en el hueso navicular.

  • Profunda: Ubicada por debajo de la anterior, que parte desde el maléolo interno hasta el astrágalo.

En tal sentido también se pueden mencionar los estabilizadores activos de dicho complejo articular los cuales parten por debajo de la rodilla y recubren en gran parte la pantorrilla en quienes son los siguientes:

  • Tibial anterior: Siendo uno de los más importantes pues, actúa de manera excéntrica durante la marcha al momento de descender el pie una vez contactado el talón con el suelo, tiene su origen a nivel de la tuberosidad tibial y recorre toda la cara anterior de la tibia hasta llegar a insertarse en el I metatarsiano y cuña medial, aparte de ello, se puede resaltar que es un potente dorsiflexor e inversor del pie.

  • Tibial posterior: Quien parte de la cara posterior de la tibia justo por debajo del músculo sóleo para insertarse directamente sobre el navicular y las tres (3) cuñas, participando en la plantiflexión y acompañando a su homólogo contralateral en el movimiento de la inversión del pie.

  • Peroneos largo y corto: Comprenden al compartimiento lateral o externo de la pierna, ambos se originan en la cabeza del peroné y cuerpo del mismo respectivamente, terminando en la base del I y V metatarsiano, son músculos sumamente importantes y en la mayoría descuidados que cumplen con una función estabilizadora al movimiento de inversión contrayéndose de manera excéntrica, pues, su principal acción radica en realizar la eversión del pie.

Una vez comprendida la anatomía del complejo articular del tobillo, se puede dar una idea de las posibles estructuras que pueden estar implicadas en la aparición de un esguince de tobillo tan común en atletas y personas corrientes.

¿En qué consiste un esguince de tobillo?

Como bien se sabe, al hablar de un esguince de tobillo, se hace referencia a una distensión parcial o rotura total que tiene lugar en las fibras de colágeno de los ligamentos que brindan estabilidad pasiva dentro del complejo articular del tobillo.

Distensión o rotura de los ligamentos del tobillo…

A nivel de la medicina y fisioterapia existe una clasificación única para los esguinces que tienen lugar en el tobillo, dado a ser tan común dentro de las distintas poblaciones, la misma se describe a continuación:

  • Primer grado: Afectación del ligamento peroneoastragalino anterior

  • Segundo grado: Afección de los ligamentos peroneoastragalino anterior y peroneo calcáneo respectivamente

  • Tercer grado: Se ven implicados los tres (3) haces del ligamento colateral externo 

Tipos de esguinces - Ejercicio y deporte

Estableciendo así, que dependiendo del grado en el que se encuentre puede existir una mayor o menor manifestación clínica de la sintomatología presente, en experiencia propia, algunas de las más comunes pueden ser:

  • Inflamación general del complejo articular del tobillo casi inmediatamente a la lesión.

  • Hematomas o moretones que se manifiestan en la parte externa del tobillo

  • Limitación considerable al movimiento de inversión y dorsiflexión principalmente por el dolor.

  • Presencia de edematización o retención de líquidos, principalmente dado al aumento de la permeabilidad local y el daño a los capilares sanguíneos

  • Hay casos en donde la sensibilidad superficial se ve comprometida, pudiendo tener hiperestesia local ante estímulos térmicos.

En éste sentido, es importante resaltar que los esguinces de tobillo por lo general suelen afectar en mayor proporción a mujeres en periodo de embarazo o durante la menstruación principalmente dado a la segregación de hormonas que favorecen el aumento de la laxitud en los tejidos blandos, de igual manera, es común encontrar lesiones como ésta en futbolistas o tenistas en donde durante el gesto deportivo deben realizar fuertes cambios de dirección o movimientos en zig - zag.

Así pues, cuando el paciente llega a consulta, la evaluación desde la fisioterapia es realmente lo más importante para poder dar con un diagnóstico y tratamiento eficaz, para ello, se deben realizar pruebas palpatorias, de los tejidos blandos como ligamentos y vientres musculares, articulares, realizando movilizaciones pasivas y observando la movilidad activa del paciente, nerviosas mediante la sensibilidad superficial para comprobar o descartar la presencia de alguna alteración en la misma, musculares comprobando la fuerza y capacidad contráctil, entre otras, para comprobar el daño real sobre los tejidos musculoesqueléticos.

Asímismo, se puede hacer inclusión de la evaluación de postura y marcha, pudiendo comprobar la manifestación de compensaciones u alteraciones como síndromes posturales, pie plano, rodillas en valgo u algún otro que de indicios del origen de la lesión.

Uno de los protocolos que han sido de mucha ayuda y han causado realmente un impacto positivo en el paciente ha sido el MEAT.

¿En qué consiste el protocolo MEAT?

Se habla de un abordaje de fisioterapia que ha surgido como tendencia en busca de corregir a protocolos predecesores como el POLICE, RICE y PRICE, en donde se hacía énfasis en un tratamiento pasivo con el uso de hielo, reposo y elevaciones del miembro, que han sido polémicas durante los últimos años, así pues, en busca de una alternativa surgió el MEAT que por sus siglas indica lo siguiente:

  • M (movimiento): Donde se recomienda al paciente realizar movilizaciones activas del miembro afectado, independientemente del rango articular si está disminuido o no. 

  • E (Ejercicio): Sumando al anterior, el ejercicio permitirá la estimulación de mecanorreceptores dentro de la zona afectada para facilitar la analgesia

  • A (Analgésico): Donde se debe recomendar al paciente el uso de analgésicos principalmente el paracetamol o algún otro que no tenga componentes antiinflamatorios, entendiendo que la inflamación es un proceso necesario para la curación de cualquier lesión.

  • T (Tratamiento): Abriendo la posibilidad de incluir las técnicas de la fisioterapia convencional dentro del abordaje de las lesiones, tal puede ser las técnicas manuales, en donde se puede agregar el masaje transverso profundo, movilizaciones intraarticulares, inducción miofascial u algún otro, igualmente se puede incluir el abordaje osteopático para mejorar la movilidad articular y fomentar a la analgesia local, así mismo, se puede incluir el drenaje linfático manual o algún agente físico bien sea térmico, mecánico o electromagnético para mitigar la clínica que se presenta.

Se puede resaltar, que éste abordaje mencionado anteriormente, se hace efectivo durante el tratamiento del estado agudo de la lesión en cuestión como lo es el esguince u algún otro, sin embargo también puede adaptarse a los estadíos crónicos de las mismas, siendo muy beneficiosa y resultando en una alternativa positiva tanto para el terapeuta como para el paciente